Prólogo
Ana Santonja Hace un tiempo vi el fondo. Entendiendo el fondo como un lugar desconocido, no sabes hacia donde caminar porque simplemente no sabes donde estas ni para donde vas, actúas por inercia, haces, piensas, sientes, dices y vives cosas que luego te hacen preguntarte: ¿Cómo es que esta pasando esto? No entendía lo que estaba sucediéndome, sin embargo, identificaba que algo no iba bien. Tenía y tengo todo lo que he pedido: una hermosa familia, estudios, viajes y a pesar de eso necesitaba poner mi energía en acontecimientos externos, es decir, mi atención estaba puesta en articular una serie de situaciones bizarras, surrealistas y que si se llegaban a concretar desmontarían por completo mi estructura cotidiana. Al verme hundida en el hueco, pedí ayuda para salir, simplemente pensé varios días: esto no está bien, no estoy bien, hay algo en mí que no esta funcionando de manera coherente, necesito revisarme. Al poner conciencia y la atención en esa afirmación, Dios o la e