Santos Inocentes
Amanecer en Caracas Estaba feliz, eran mis primeras vacaciones como funcionaria pública, 21 días hábiles y dinero suficiente para hacer lo que a mi me diera la gana, dentro del territorio nacional (cabe destacar), no tenia pareja, peor es nada, ni perro que me ladrara. Decidí entonces realizar un viaje de reencuentro con mi añorada capital, allí estaría con viejos amigos de la universidad, mi hermanita y su espectacular trasnocho cultural (cine gratis), vida nocturna, sexo, drogas y rock and roll, ¡¡¡¡Yupi!!!Luego partiría a las espectaculares playas de Choroní y cerraría en el Forum de Valencia, con la puesta en escena del ahora difunto, Marcel Marceau, Todo estaba fríamente calculado, las cartas estaban echadas para que mis vacaciones fueran lo máximo. 8 horas de viaje en autobús me separaban de la entrañable Caracas. 8 horas de sueño escalonado en un súper mega guay autobús, asientos reclinables gigantes, peliculita pirata, baño y un insufrible aire acondicionado a toda mecha, lo m