Mamifero Volador

Decidí apuntarme en el concurso una foto x 29 días organizado por el taller de fotografía de Roberto Mata, para desconectar un poco de mis habitus cotidianos. Cuando tienes un bebe casi niño de dos años, lo más sano para la criatura es que cumplas una exhaustiva rutina, eso le ayuda a tener confianza y afianzar habitus como: comer, dormir, jugar, bañarse. Pero para un adulto inquieto, la rutina de los habitus suelen contribuir a mermar la creatividad, a sofocarte en el cotidiano, a pensar tonterías y a crearte telenovelas de un contexto maravilloso.
En dos días de concurso he podido reflexionar y experimentar la riqueza de romper con los esquemas habituales de pensamiento.
El primer reto fue el titulo de este post "Mamífero Volador", cuando lo lees, piensas automáticamente en un murciélago, pregunte y urge un poco por edificios abandonados de mi pueblo, le pregunté a algunos amigxs y conocidxs y no encontré una respuesta coherente, ni ha los fulanos murciélagos. Al no tener a mi murciélago volador, mi creatividad se activo, comencé a pensar que los humanos somos en lo más básico animales y además tenemos el don divino de volar. Solo basta cerrar los ojos, hacer algunas respiraciones conscientes, escuchar una música que nos conecte y zas, puedes llegar hasta donde quieras, sin psicotrópicos ni estimulantes.
La magia de ser niño, es que no tienes pre-juicios, ni esquemas, sólo te dedicas a experimentar. Recuerdo perfectamente la sensación de volar en los columpios, era una sensación maravillosa, podía sentir que tocaba el cielo, las nubes, el sol, el aire me daba en la cara, cerraba los ojos y era libre como un águila surcando los cielos.
Esa es mi objetivo de crianza: Regalarle a mi hijo la maravillosa experiencia de volar.
Comentarios
Me encanta la comparación del título y la foto :-D