Un escapista


Esta imagen quedó tal cual como quería que quedara. Este día ha sido uno de los más agotadores físicamente pero más gratificante.

Vi la foto en mi cabeza y cuando la vi en el ordenador era igual. Perfecto. Estoy muy satisfecha y contenta.

No se si mis compañeros de concurso tienen esta misma situación, pero después que pasan los retos tengo tantas ideas sobre los temas. Pero al leer el reto del día me entra tanto agobio que me paralizo, la mente con el pasar de los días se esta volviendo más cómoda y se conforma con pensar que esta bloqueada. A esa mente le respondo: Pues te desparalizas rápido y te pones a mover la materia gris, que para eso te alimento.

Escapistas hay muchos. Los novios que te dejan y simplemente te dejan de coger el teléfono, te dejan de responder el telefonillo de su casa, te borran del feesbook.

También están los bebes cuando comienzan a gatear y a caminar, no los puedes dejar de ver cinco segundos porque se escapan de tu campo visual en un plis plas.

Tenemos también a los que te deben dinero, son como los novios pero sin derecho a roce y además te hacen sentir tan mal por pedirles algo que te pertenece, como si fueras la peor persona del planeta. A eso les digo: No cariño mio, te hice un favor y me diste tú palabra, te perseguiré hasta que tenga energía de perseguirte y ya se que te escaparas mientras tengas energía de escaparte y allí estaremos los dos, jugando al ratón y el gato.

Están también los ladrones desconocidos, los adolescentes cuando no les das permiso para ir a una fiesta, los animales en el zoológico que pasas media hora buscándolos y los bichos son tan astutos que se meten en el hueco mas recóndito de su espacio para que no los puedas ver. En este plano hay muchos tipos de escapistas.

Me decante por los profesionales. Los que hacen del escapismo un modo de vida.

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